jueves, 24 de diciembre de 2009

Un dia cualquiera...


Hoy me desperté un tanto tarde, creo que es la sensacion de libertad que siempre me sorprende en este día, en el que, aunque todo parece estar hecho de una extraña sensacion, y que también todo parece estar en el mismo lugar, sabemos que nada es igual. No pregunten por qué.

Hoy tal vez sea un día normal, las calles están mojadas (creo que al fin el chocolate caliente no desentonará en mi país), y el viento es el mismo de ayer, pero yo sigo comvencido de que aun no es demasiado tarde para responderme a mi mismo, porque hoy importan un poco más el pasar de las horas, y la forma que toma el amor.

Hoy es un dia normal, pero la nostalgia sabe que algo pasará, las lucen se encienden, y el estruendo de los cohetes que tanto me molestan, se mezclan con el ruido de los pasos de la gente hacia todo lugar, y al final de la avenida un árbol cualquiera brilla a fuerza de pequeños focos a su alrededor, al final yo solo me quedo en silencio. Entonces veo una gran familia entrando a una casa pequeña, solo entonces empiezo a creer que quizás esto sea necesario, solo para volver hacia ese lugar del que todos salimos alguna vez.
Las horas siguen pasando, en la television un concierto nostálgico me hace recordar navidades pasadas, entonces me doy cuenta que esta noche sera predecible, solo un poco, y a la vez toda esta noche.
De nuevo el estruendo de los cohetes, entonces una extraña soledad, y entonces solo esperar.
El amor se hace nostálgico esta noche, y lastimosamente lo ridículo sigue presente en todo lugar.
Pero a pesar de todo, de alguna manera se que al final de la noche, no podre olvidarme de ella, sea cual sea la razón se también que seguiré esperando tantas cosas, aunque quizás mañana, como ha pasado tantas veces, no me afecte tanto la desilusión al final del día.
Pero, en medio de tantas cosas que recuerdo y que sé, creo que al final logro comprender por qué hoy nada es igual, porque a diferencia de tantos dias, hoy nos gusta la razon para vivirlo, y nos gusta recordar, y sentirnos un poco niños otra vez, aunque sea solo un momento y aunque sea tambien solo por un momento.


miércoles, 23 de diciembre de 2009

El viento entre las cosas ( de Ayer)...



Hoy he querido hablar de los recuerdos, de las sombras entre las horas, y de la luz de las palabras, al final, siempre, he querido hablar del viento entre las cosas.

Hoy me he dado cuenta de lo mucho que he andado, tal vez por los mismos lugares, una y otra vez, y aun asi me sorprende el cómo he visto cambiar tantas cosas; y me sorprende más todavia, el hecho de que yo tambien lo haya hecho casi sin querer.


Aunque dia tras dia, pareciera que nada hubiera cambiado, y que entonces nos levantemos a la misma hora,con el mismo frio en el cuerpo, y con la misma tibieza en el rostro; y en la almohada la misma suavidad con la que nos acostamos la noche anterior.

Pero lo unico cierto es que ya todo de dejo de ser, para volver una y otra vez, dando vueltas alrededor de aquello que nos enseña como levantarnos mañana.

Digamos que poco apoco vamos dejando de ser un poco niños, y nos vamos comvirtiendo en algo distinto, y no dire en adultos, porque creoq ue en realidad nadie sabe lo que eso significa, lo unico que sabemos en realidad es que vamos cambiando, solo un poco, para que no nos aterre el hecho de que ya no podremos sentir de la misma forma, en circulos o en espirales, al final de cuentas no importaba, todo era infinito ; sino que ahora tenemos que aceptar que todo tiene final; extraño cuando creia que todo era eterno, y que solo bastaba un poco, solo un poco para los sueños más grandes. Extraño el niño que era ayer,y me pregunto en que me comvertire mañana. Y entonces entiendo esa pregunta...
Hoy tambien he recordado canciones, canciones tan mias, y de tantos dias, hoy me he despertado recordando tardes, y sus canciones, y a mi mismo tratando de hacer malabares con ellas, armandome siempre de mi simceridad y mis palabras, siempre tratando de entender tantas cosas, reales o no, eso no importaba, sino solo las horas que tome de aquellas dudas para crecer un poco más, al final, todos sabemos que nunca es tarde para una pregunta que nos ayude a comprender el juego de los dias; que siempre juegan, claro, a no saber.

Los mismos pasos, y siempre la misma certeza de que ya casi es ayer, lo extraño es que hay siempre un sabor distinto en las ideas, y en la forma de vivir.

Hoy siguen habiendo muchas cosas que no se, no se cuando llegara a ser demasiado tarde para seguir haciendo esto, o cuando sera demasiado pronto para hablar de amor.

Y para hablar de la chica que sera una vez mas la razon de aquello tan parecido a la soledad, y que se, al fin que es solo una intencion, la forma que tengo de hablar, de entender, la forma mas sutil en la que me asalta el por qué.