sábado, 12 de febrero de 2011

Adioses de Artificio

No hay adioses de mentira, no es a eso a lo que me refiero con este titulo, sino solo a la artificialidad de algunos finales, que nos vemos obligados a tomar. La obligacion de algunos de despedirnos de la nada, y de salir de tantas vidas, tantas veces, a pesar de que nunca llegamos a acostumbrarnos a ello.
Siempre por la salida de emergencia y sin mirar hacia atras, a veces velozmente y otras con el tiempo suficiente para saber solo lo inevitable, lo absurdo y lo obvio. Absurdo como el estallido de amor; obvio como el desencanto.
Cuesta, lo admito, salir de alguna vida, a obscuras y en silencio, para que no se alargue más de lo debido , y en muchos casos de lo soportable. Siempre cuesta. Y me atrevo a decir que cuesta más cuando eres tú el que debe olvidar, el que debe ir y venir a ningun lugar.
Los medios caminos son historias inconclusas, que duda cabe. Pero hay historias que no merecen un final, sea por las razones que sean, es mejor  solo dejarlas ir.
 Porque es entonces, una historia hecha del azar, de la incompletud de un instante, del erotismo de un momento inolvidable que aunque al final no lo parezca, solo nos ayudan a saber vivir.Pero, entonces, de nuevo un adios de artificio, como los fuegos de esos instantes, en tus ojos, en tu voz y en tu silencio; que se terminan siempre extinguiendo frente a un espejo.
Pero hasta que eso pase ya hemos sido felices, entonces la vida se hace un trato justo; entonces me doy cuenta que el adios es solo una pretexto para anclarnos al recuerdo de alguien durante algun tiempo, porque nunca se puede despedir uno de aquellos instantes ni de aquellas personas que se han quedado escondidas en algún lugar de nuestra propia vida, ayudandonos a vivirla.
Es tarde; y me ha tomado por sorpresa una lluvia que hace los recuerdos y las palabras un poco más llevaderas. Es tarde; pero no demasiado; solo lo suficiente para que un adios no pierda su verdadero significado, y se haga artificial como en tantos momentos en la vida; donde es mejor simplemte guardar silencio...

No hay comentarios: