Hoy descubrí muchas pequeñas cosas mientras me encontraba leyendo el blog de una mujer tan hermosa como inteligente, y tan intensa como tiernamente ingenua... o al menos así quiero creerlo yo.
Solo nos queda una ida y vuelta, es cierto, una ida al deseo, una vuelta a la desidia. Lo extraño es que en medio de todo ello hay muchas personas, y nosotros no queremos aceptarlo. Tal vez no estamos hechos para ello, sino simplemente para pensar que siempre seremos la ultima persona, la persona absoluta.( nuestro afán trascendentalista, cuando no) el fin de una búsqueda que empieza con cada amanecer, y de una manera tan distinta cada vez. Es tanto, y entonces lo único que podemos entender, es que es que no comprendemos nada, y no hacemos más pequeños aún buscando respuestas que no nos conciernen. Los porqués solo corresponden a respuestas que podamos encontrar en nosotros mismos.
Una ida al deseo del amor, del amar, del volver tantas veces al mismo lugar, con la piel cada vez mas extraña, no tiene que ver con el tiempo ni con las personas, sino tal vez con lo que encontramos en algunos ojos al cruzar la calle, o con lo que queremos ver en ellos; y quizás con lo que vamos necesitando sin darnos cuenta. Pero siempre es tan difícil de entender. No lo que vamos buscando, sino lo que vamos encontrando ( o redescubrimos); y nos sorprende. Y Entendemos que el camino hacia la desidía sigue, y lo único que queremos es continuar. Y a pesar de que la culpa no debería existir esta allí, porque es necesaria para saber que nos equivocamos al quedarnos demasiado tiempo en algún lugar (o con alguna persona).
Y los errores se pagan, no importa quien o quienes lo hagan, simplemente se pagan.
La vida se parece tanto a pedazos de una historia mal contada... Decía yo en uno de estos post improbables que de cuando en cuando se abren paso en mi cabeza y se derraman por mis dedos así, casi por casualidad.
Siempre desordenada, siempre a la mitad, a veces empezando por el final la vida busca formas de empezar, y las personas, en ella, no lo pueden entender. Siempre queremos ser lo definitivo y tenemos miedo entonces de que todo vuelva empezar...
Pero al final solo queda la contemplación, la desidia, de solo recordar lo vivido, de no querer volver a vivirlo porque solo es posible aprender una vez aquello tantas veces inexplicable, aunque eso tampoco queramos creerlo, ni sepamos comprenderlo; pero a la vez queda también la nostalgia de aquellas personas que no quisieron quedarse con nosotros, cuando, sin dejar de amarlas en realidad, (aunque tal vez de una forma distinta), simplemente decidimos seguir. Comvirtiendonos , entonces, en simples hombres leales, pero tan inmensamente infieles...
Y en medio de todo ello la confianza, que es solo pretender sujetar a un corcel con el viento; al borde del mar...
La confianza como tal es como ponerle un libreto al destino y a la inconstancia, a la forma impropia que tiene cada uno de ser, y lo digo así porque que al final de cuentas es impropia nuestra conducta en cuanto le pertenecen mas que nada a las circunstancias, y al deseo de vivirlas ( siempre visto desde un punto de vista hedonista como es el mio, vale decir). La confianza que nos tienen no nos hace éticos, muy a pesar de todo aquel que quiera verlo de ese modo. Creo que no deberíamos pedirla ni recibirla, una sonrisa se me dibuja, lo admito, mientras pienso que es solo una forma egoísta de negarle la libertad a alguien que solo por ser quien es debería tenerla. y también una forma cruel de negarnos libertad a nosotros mismos. Un rotulo que empieza y termina en el temor a la soledad, a la burla, y a saber que no podemos controlar, en el sentido tierno y " desinteresado" de la expresión, ni siquiera a la persona que más queremos, y la que , seguramente, también nos quiere de tantas formas.
La confianza es una crueldad de amor... Es decirle alguien que sabes lo que hará mañana aquí, sin ti, porque te ama. Es decirte tantas veces que debes ( o deberías) hacerlo porque la amas.
Es preguntarte al final, cuando lo inevitable ocurre, muchas veces ¿ Es que acaso no la amo?
El amor tendría que ver con la libertad, no con lo confianza ( un tanto hippie de mi parte, ok tal vez bastante).
No hay comentarios:
Publicar un comentario